Introducción

El cuscús, conocido como el alma de la cocina marroquí, es un plato que responde a la riqueza y diversidad de su tierra de origen. Como rey de las mesas y el corazón de las celebraciones, esta deliciosa receta es un símbolo de hospitalidad y generosidad. A continuación, te guiaré en un paso a paso para preparar este platillo emblemático.

Ingredientes

Para el cuscús necesitarás: 500 gramos de sémola de cuscús, un par de zanahorias, una cebolla, un par de calabacines, un pimiento rojo, 300 gramos de cordero (puedes sustituirlo por pollo), un puñado de garbanzos, caldo de pollo, y para darle ese toque marroquí, ras el hanout, un mix de especias que puedes encontrar en tiendas especializadas. No olvides el aceite de oliva, la sal y el perejil para decorar al final.

Preparación

Primero, debes lavar y cortar las verduras junto con la carne en trozos grandes, luego sofríe la carne con la cebolla y un poco de aceite. Añade la zanahoria y el pimiento y sigue cocinando a fuego lento. Posteriormente, añade los calabacines y los garbanzos. Añade el caldo de pollo junto con las especias ras el hanout y deja cocinar a fuego lento. Mientras que el guiso se cocina, prepara el cuscús según las instrucciones del paquete, suele ser bastante simple, solo añade agua caliente y separa los granos con un tenedor. Cuando el guiso esté bien cocinado y la carne esté tierna, puedes añadir el cuscús, mezcla bien y deja que se impregne de los sabores de la mezcla durante unos minutos. Sirve bien caliente y decora con perejil fresco.

Consejos importantes

El secreto de un buen cuscús es cocinarlo a fuego lento para que la carne y las verduras se vuelvan tiernas y sabrosas. Por otro lado, el ras el hanout puede variar de una región a otra, así que no dudes en añadir especias adicionales al gusto. Y siempre recuerda que la mejor comida se hace con amor y paciencia.