La mañana del 26 de abril de 1986
El 26 de abril de 1986, una explosión en la central nuclear de Chernobyl en la antigua Unión Soviética sorprendió al mundo. Durante una prueba de apagado de emergencia a última hora de la noche, el reactor número 4 explotó, liberando una cantidad de radiactividad que ha dejado consecuencias hasta el día de hoy. La explosión ocurrió a la 01:23 am, pero la población de la cercana ciudad de Pripyat, hogar de muchos trabajadores de la planta, no recibió aviso de evacuación hasta aproximadamente 36 horas después del incidente.
El encubrimiento inicial y la revelación
El gobierno soviético inicialmente intentó encubrir la magnitud del desastre. Solo cuando las estaciones de monitoreo en Suecia detectaron niveles de radiación elevados y otros países europeos comenzaron a hacer preguntas, la Unión Soviética admitió que algo estaba mal. El 28 de abril de 1986, la Unión Soviética informó oficialmente del accidente a la comunidad internacional. En el transcurso de las siguientes semanas, helicópteros militares soviéticos volaron innumerables misiones para lanzar 'saquitos' de plomo, boro y arena al reactor en llamas en un esfuerzo por apagar el fuego y limitar la liberación de radiactividad.
Consecuencias de salud a largo plazo
Los impactos de salud directos de la explosión incluyeron dos trabajadores de la planta que murieron la noche del accidente y otros 28 empleados y personal de respuesta a emergencias que murieron de síndrome de radiación aguda y quemaduras en las semanas posteriores. Sin embargo, los efectos a largo plazo han sido más difíciles de cuantificar. Miles de personas fueron expuestas a niveles altos de radiación, y muchos han desarrollado cáncer u otras enfermedades como resultado. Un estimado de más de 4.000 casos de cáncer de tiroides han sido diagnosticados entre las personas que eran niños o adolescentes en el momento del accidente y vivían en zonas muy contaminadas.
El legado de Chernobyl
Hoy, el lugar del accidente es una zona de exclusión, un área deshabitada de 30 km donde la naturaleza ha retomado muchas de las estructuras abandonadas. La catástrofe nuclear de Chernobyl sigue siendo el peor desastre nuclear en la historia en términos de costos y bajas. Su legado incluye la evacuación y reubicación forzada de más de 300,000 personas, devastadores problemas de salud a largo plazo y daños económicos y ambientales incalculables.